Un total de 41 personas con discapacidad física e intelectual, con la inquebrantable colaboración del voluntariado, protagonizaron el sábado en el Centro Laín Entralgo de Zaragoza el tradicional evento del Centro de Actividades Socioculturales. En esta ocasión, la representación sobre el escenario del Festival Fin de Curso giró en torno a la convivencia y las situaciones que surgen en el día a día de una comunidad de vecinos.

Los nervios de última hora y la ilusión por hacerlo bien se notaron en las caras y los gestos de los diferentes puntuales actores y actrices durante los minutos previos. Después, sobre el escenario todo fue rodado. Los cotilleos de las vecinas, la mudanza de una pareja que no sabe muy bien lo que se va a encontrar en la comunidad, una familia con un hijo no reconocido o la junta vecinal fueron algunas de las hilarantes situaciones reproducidas sobre las tablas. Entre medias, vídeos, mucha música y un gran ambiente.

En la representación participaron 32 personas con discapacidad intelectual, que durante el curso asistieron al taller de baile del Centro de Tiempo Libre (CTL). El reparto contó también con la presencia de nueve personas con discapacidad física del Centro Cultural y Recreativo (CCR), habituales en el taller de teatro. Junto a ellos, un grupo del voluntariado de Fundación Dfa. Su entrega y predisposición, como es costumbre, fue reconocido y permitió que la organización del equipo técnico del Centro de Actividades Socioculturales saliese a la perfección.

Disfrutó a lo grande el público, con un salón de actos abarrotado gracias a la presencia de familiares y amigos que no quisieron perderse el espectáculo. Lo demostraron agradeciendo el esfuerzo de todos con innumerables ovaciones y muestras de cariño.

El Festival de Fin de Curso de Fundación Dfa y Fundación Instituto para la Integración Social (FIIS) es una iniciativa impulsada por el Gobierno de Aragón a través del proyecto de promoción del asociacionismo juvenil del Instituto Aragonés de la Juventud.

El verano ya está aquí

Se puso punto y final de esta forma al programa del curso 2022-2023. La actividad continúa durante el verano, con diversas actividades que el equipo técnico del centro de Actividades Socioculturales ya tiene perfiladas. Jornadas de piscina para los usuarios y usuarias y, a finales de julio, se retomarán los viajes vacacionales. El destino elegido este año es el albergue Pirenarium de Sabiñánigo. Esta refrescante opción está abierta a personas con y sin discapacidad, quien estarán acompañadas por una parte fundamental en todo lo que se lleva a cabo como es el voluntariado.