La Unidad de Lesionados Medulares (ULME) del Hospital Miguel Servet recibió este lunes la visita del grupo musical Maracaibo. Durante algo más de una hora, los boleros y otras canciones de esta formación zaragozana sirvieron para crear una atmósfera cargada de sonrisas, aplausos, bailes y, sobre todo, buen ambiente.

Como es habitual, los pacientes y sus acompañantes disfrutaron de un rato diferente y divertido que no se quisieron perder parte del equipo sanitario y del personal voluntario de Fundación Dfa. La última actuación antes del parón del verano la protagonizaron siete integrantes de Maracaibo. Con su habitual toque de desenfado y armados con su voz y sus instrumentos, consiguieron hacer feliz a un público que se lo pasó en grande.

La llegada de la pandemia provocó la suspensión de unas actividades que la entidad organiza a través de su voluntariado en colaboración con la ULME, pero que se volvieron a retomar el pasado mes de mayo. Ángel Cortés, padre del tenor y finalista del programa de televisión ‘La voz’ de 2019, recuperó entonces una tradición que el covid obligó a detener. En junio fue Carmen Santaliestra con sus poesillas solidarias quien ofreció un íntimo espectáculo con diferentes estilos musicales.

Desde 2015, año en el que surgió la colaboración entre Fundación Dfa y la ULME, las personas con lesión medular que participan en las diferentes sesiones han disfrutado de actividades y bandas.