En ocasiones, las familias os preguntáis cómo podéis colaborar desde casa para que vuestros hijos/as aprendan con más facilidad los conceptos que les enseñan desde el colegio. Nuestra recomendación suele ir orientada a apoyar estos aprendizajes de una manera divertida, dejando a un lado el lápiz y el papel. Mediante el uso de materiales sensoriales podemos facilitar, además, que la vivencia se integre mejor, es decir, que quede “grabado” en su memoria de manera más sencilla y eficaz.

Algunos ejemplos para apoyar aprendizajes escolares tales como letras, números, colores, lectoescritura… son los siguientes:

• Utilizar una superficie con harina, sobre la que podemos escribir con el dedo letras, número, palabras, frases… dependiendo del nivel de aprendizaje del niño o el concepto que queramos reforzar. También podemos simplemente dibujar para fomentar su ideación, el desarrollo del dibujo o el aumento del vocabulario.

• Moldear con plastilina también hará que aprendan de manera más divertida, y lo usaremos igual que en la descripción anterior. También podemos utilizar una bandeja sobre la que colocaremos una capa de plastilina y, con ayuda de un punzón, podemos emplearla como una pizarra. ¡Seguro que les divierte!

• Con pinzas de tender la ropa podemos escribir letras con las que luego formar palabras agarrándolas en diferentes superficies. También podemos escribir sobre ellas números y los diferentes signos matemáticos para crear divertidas sumas, restas, multiplicaciones…

• Otro material muy interesante es la espuma de afeitar y/o la crema hidratante. Con ellas podemos jugar a escribir y dibujar sobre diferentes superficies o partes del cuerpo.

• Se puede fomentar el conteo mediante actividades dinámicas con pelotas o globos. Por ejemplo, podemos pasarnos la pelota mientras contamos los pases o los golpes que le damos a un globo sin que toque el suelo; o contar las pelotas que somos capaces de encestar (también se puede hacer con bolas de papel y una papelera).

• Hacer operaciones matemáticas haciendo huellas de dedos sobre una superficie. Para ello podemos usar pintura de dedos y papel. También podemos usar pintura de dedos para el reconocimiento de colores y fomentar la imaginación y creatividad.

• Los pompones nos pueden dar mucho juego. Podemos usarlos para clasificarlos por colores, pegarlos en un papel para resolver operaciones matemáticas, pegarlos sobre el dibujo de una letra para aprender su grafía, etc.

• Crear cajas sensoriales (con arroz, garbanzos, lentejas…) y esconder dentro diferentes objetos en función de lo que queramos estimular. Por ejemplo, para estimular el reconocimiento de colores, se pueden esconder varios objetos pequeños de diferentes colores y pedirle que los encuentre en un orden concreto. Para el reconocimiento de números o letras, podemos crearlos con cartón en un tamaño reducido que nos permita esconderlos, y jugar a encontrarlos.

• Con niños/as más mayores, podéis jugar a escribir con el dedo sobre su espalda letras o palabras que deberá identificar.

Esperamos que todos estos recursos os sean muy útiles. Aprender de forma divertida es posible, así que ¡a por ello!