25 Junio, 2025
Beneficios de las actividades en el medio acuático
La llegada del buen tiempo siempre anima a pasar más horas al aire libre, pero la práctica deportiva se ve dificultada por las altas temperaturas. Sin embargo, para subsanar este problema y mantenernos activos en la época estival, cobran importancia los deportes acuáticos.
Cualquier actividad realizada en el agua es una gran aliada para salir del sedentarismo, mantenernos en forma y compartir experiencias. Además, por lo general, resultan ser muy divertidas, y nos aportan múltiples beneficios, por lo que os animamos también a practicarlos el resto del año en piscinas climatizadas.
Veamos a continuación todo lo que nos aportan dichas actividades en las diferentes áreas del desarrollo:
Área motora
- Mejora la fuerza muscular. La actividad acuática trabaja todos los grupos musculares. Además, la resistencia del agua proporciona un entrenamiento de bajo impacto que fortalece la musculatura sin ser agresivo con las articulaciones.
- Mejora la coordinación y el equilibrio. Desplazarnos y cambiar de posición dentro del agua implica desarrollar un buen control postural y cierta coordinación motora, por lo que es un medio ideal para estimular a nuestros peques. Además, permite practicar movimientos que, fuera del agua, serían difíciles de realizar.
- Resistencia. Nadar, o simplemente la necesidad constante de llevar a cabo adaptaciones y ajustes corporales, nos hace estar en continuo movimiento, mejorando así la resistencia muscular y el trabajo cardiorrespiratorio.
- Potencia la coordinación ojo-mano y la destreza manual: lanzar o atrapar objetos en el agua mejora el control y la coordinación de estos movimientos.
Área sensorial
- Propiocepción. El contacto y la resistencia del agua sobre nuestro cuerpo proporciona un estímulo constante a los receptores táctiles y propioceptivos. Este estímulo aumenta cuando las niñas y niños se sumergen con camisetas.
- Vestibular. La flotación y sensación de ingravidez hace que el sistema vestibular se beneficie de movimientos que no pueden realizarse en otros ambientes.
Área emocional
- Autonomía. Las actividades acuáticas mejoran la autonomía desde el momento del cambio de ropa hasta poder salir y entrar solos al agua o desplazarse, sobre todo si fuera de ella no pueden hacerlo por sí mismos.
- Autoestima y seguridad. Adaptarse a un nuevo medio, superar el posible miedo inicial, conseguir mejorar día a día y poder disfrutar de la actividad, aumenta la autoestima y la seguridad en uno mismo.
- Favorece las relaciones interpersonales. El agua es un medio idóneo para entablar relaciones con iguales, tanto dentro del agua como en los momentos previos: fuera del agua con globos o pistolas de agua, salpicar, tirar objetos…
- Puede reducir el estrés y favorecer la relajación. La flotación, junto con las diferentes presiones y las corrientes, favorece la relajación del cuerpo. No obstante, es más complicado lograr este beneficio en aguas frías.
- Fomenta la creatividad e imaginación. El agua también ofrece muchas oportunidades de juego sin estructura que estimula la imaginación: podemos inventarnos que somos peces, o jugar a piratas, etc.
Además del simple, pero importante, juego libre en piscina o mar, existe un gran número de actividades que podemos realizar en el agua y que se pueden adaptar a nuestro nivel y características personales, como son: natación, natación sincronizada, natación terapéutica, acuagym, acuafitness, buceo, relajación, estiramientos, waterpolo…
Gracias a la fácil adaptación de este tipo de actividades a cualquier edad o característica particular (física o cognitiva) hace que los deportes acuáticos sean actividades realmente inclusivas.
Así que… ¡todos al agua!